Madrigal, Mario. “La otra Hoja de aire”. La Nación (San José, Costa Rica), 2 de agosto de 2004, p. 27A
Hace poco más de 3 años que se presentó, con mucho éxito, en el teatro Vargas Calvo La hoja de aire, de Joaquín Gutiérrez, dirigida por Alfredo Pato Catania y actuada por Luis Fernando Gómez. Se trata de una pequeña (en extensión, no en calidad) novela de ese magnífico escritor, que fue adaptada por Alfredo en un profundo y humano monólogo.
Ahora regresa la obra, pero esta vez no solo dirigida, sino también actuada por Catania que la presentó, entre aplausos, en Argentina. “A pesar de ser una pieza tan tica, tan nuestra, incluso con muchos modismos costarricenses, tuvo un enorme éxito, sobre todo en Buenos Aires. Ahora pienso llevarla a varios países centroamericanos”, comentó.
Es sumamente interesante observar la creación del personaje que hace Pato, muy diferente a la que hizo Luis Fernando, pero tan valiosa una como la otra. Después de todo, la obra es una sola y en las dos actuaciones se conserva el drama de un pobre diablo, de un fracasado, según las normas de nuestra sociedad de consumo, pero ¡qué profundidad hay en sus sentimientos, en su dolor, en sus aspiraciones y en el amor de la infancia que no desaparece nunca a pesar de la cruda realidad de este mundo materialista!
Me contó, asimismo, Pato que piensa llevar “su hoja” a un festival de monólogos en setiembre en Argentina. “Me gustaría mucho que ganara un premio, no por mí, eso no importa, sino por tratarse de una obra costarricense”, dijo.
También me contó que es muy posible que su hermano Carlos, tan recordado aquí, nos visite con una puesta en escena durante el próximo Festival de las Artes.
Son estas actividades las que nos hacen crecer y creer que el arte y la cultura sobrevivirán, a pesar de la mediocridad, el mal gusto, la vulgaridad y baja calidad de algunas presentaciones teatrales y televisivas.